Este díptero tiene un cuerpo chato. Por lo general vive bajo las piedras y los pescadores lo usan como cebo. Al igual que los demás insectos, las moscas de la piedra exhiben las mismas características y sistemas que tenían cuando aparecieron en la Tierra. Los ejemplares fosilizados revelan que no han pasado por ninguna etapa intermedia. Las que vivieron hace 156-150 millones de años son iguales a sus congéneres de hoy día. Este fósil también quedó expuesto en dos partes, denominadas negativa y positiva.