Aquí ilustrados se encuentran un seudoescorpión y una mosca en ámbar báltico. Los sudoescorpiones se parecen a los verdaderos escorpiones, pero no poseen colas. En este ejemplar en ámbar, se pueden ver estos rasgos claramente. Su longitud es de entre dos y ocho milímetros (de 0,07 a 0,3 pulgadas).Hasta recientemente, se pensaba que los seudoescorpiones databan de hace sólo 30 a 45 millones de años, pero ahora han sido descubiertos ejemplares de hace 380 millones de años (del período Devónico). Los seudoescorpiones no han tenido cambios por un intervalo de 400 millones de años, lo cual refuta la teoría de la evolución.La mosca que lo acompaña en ámbar es otra criatura que mantiene su existencia y de esta manera refuta a Darwin.