Ser positivo implica someterse a Allah independientemente de las condiciones o la situación, cómo se desenvuelvan los eventos o la dirección que tomen. También implica tomar todos los eventos sin ansiedad ni preocupación, y sin la menor duda de que por ser creyentes, todos los eventos se tornarán eventualmente hacia lo mejor.
Una de las características más importantes de los creyentes es que vuelven a Allah en todos sus asuntos y someten su destino incondicionalmente. Aún si las cosas no salieran como planeaban, no obtuvieran lo que realmente querían o perdieran algo o a alguien que realmenta amaban –en poco, en todas las circunstancias- se vuelven a Allah y ven lo bueno y lo mejor de cada evento. No es posible oir a los creyentes decir: “¿Por qué pasa esto?” o “Si tan solo esto no hubiera ocurrido”, porque están contentos con Allah desde el principio y han sometido su destino.
Los creyentes suplican lo mejor a Allah, dado que ellos no pueden saber qué es “lo mejor” para ellos de antemano, porque tal conocimiento es conocido sólo por Allah. Por ejemplo, los creyentes que están completamente comprometidos con el Islam pueden desear que otra persona reciba la guía, para que acepte y practique el Islam, y pueda, esperando este evento, orar a Allah. Obviamente, quieren lo que es bueno y legítimo y tienen buena intención. Sin embargo, aceptan, que “Allah sabe lo mejor después de todo”. Como que una persona sólo puede tener fue si Allah así lo quiere, los creyentes que ven a aquellos que aman no recibir la guía se dan cuenta que debe haber algún bien en esto y así no se entristecen ni caen en desesperación. Allah ha aclarado este hecho en el siguiente versículo:
Ciertamente tú no guías a quien amas sino que Allah guía a quien quiere y Él sabe mejor quiénes pueden seguir la guía. (Sura del Relato, 56)
Consideremos otro ejemplo: Los creyentes naturalmente querrían pasar todo su tiempo con otros creyentes, porque son protectores el uno del otro y entre los amigos más cercanos y hermanos y hermanas. Cada uno de ellos se ha dedicado a Allah y a Su religión, y así se dan gran felicidad de estar juntos. Pero puede que no sea posible para ellos estar siempre juntos. Por ejemplo, pueden encontrarse lejos de sus seres amados mientras sirven al Islam, o, como ocurrió en tiempos del Profetas (saaws), pueden verse forzados a migrar debido a la opresión de los incrédulos. Estar en compañía de creyentes es obviamente algo muy bueno; sin embargo, perseverar en contra del sufrimiento y la opresión con la camino de Allah puede llevar a incluso recompensas más grandes y cosas mejores.
Sabemos de los profetas y creyentes que fueron exiliados y encarcelados por los que rechazaron el Corán. En situasiones similares, los creyentes nunca pierden la esperanza, porque saben que un hecho tal es muy beneficioso para ellos. Su meta es mostrar la mejor moral en toda situación y así ganar la recompensa y la complacencia de Allah. Desean el gran placer de convertir cualquier lugar en el que estén, en un lugar para adorar.
La actitud resignada de los creyentes bajo toda circunstancia muestra que tan sinceros son en su fe. Incluso si sucumbieran a la enfermedad más grave o si las circunstancias necesitaran su presencia en los lugares más duros, continúan constantemente esperanzados y sometidos, siempre pensando en la razón divina detrás de cada situación y en el bien que viene detrás