Estos escarabajos, miembros de la familia Eucnemidae, son mayormente marrones o negros y habitan áreas de bosques. Los fósiles muestran que los falsos escarabajos floridos siempre han existido como tales, nunca han sufrido ningún cambio y no evolucionaron de algún otro insecto. A pesar de los millones de años que han transcurrido, los falsos escarabajos floridos que no han sufrido ningún cambio refutan las afirmaciones de los evolucionistas.