Los erizos de mar pensilvánicos son equinodermos que se pueden encontrar hoy día en todos los mares del mundo. Fósiles de hace 300 millones de años de estas criaturas invertebradas, revelan que han existido, como son, todo este tiempo. No han sufrido ningún cambio en su estructura y no pasaron por ninguna etapa intermedia.Los darwinistas se desesperan cuando tienen que hacer frente a esta realidad, puesto que demuestra que nunca existió el proceso evolutivo.