En el Corán Dios lo explica todo de la mejor y más sabia de las maneras, y revela a la gente el verdadero camino. Las personas que se rigen por el Corán son las que piensan más racionalmente, toman las mejores decisiones, se comportan mejor y poseen cualidades excelentes, son las más selectas, amables y compasivas del mundo, que no hacen daño a nadie y que no sólo se benefician a sí mismas sino a los que las rodean.
Sin embargo, bajo la influencia de algunas publicaciones que se oponen a la creencia en Dios y a los valores morales religiosos, algunas personas tienen una idea errónea de los musulmanes y creen que no son modernos o racionales. Por supuesto, no se puede negar el papel que tiene en la formación de esta imagen distorsionada el comportamiento de quienes reconociéndose musulmanes, viven de una manera totalmente ajena a los valores morales ordenados por Dios en el Corán
Lo cierto es que aquel musulmán que encarna las virtudes morales prescritas por el Corán no sólo es moderno, sino súper-moderno y sumamente racional. La nobleza de su apariencia, su conducta y su comportamiento trascienden la modernidad y la racionalidad del momento en que vivimos. Tanto es así, que si el Profeta Muhammad (que Dios le bendiga y le conceda paz) apareciera hoy sería inmediatamente reconocido como la persona más contemporánea de este siglo, e incluso de los siglos por venir.