Allah declara en el Corán que ha creado al genero humano de acuerdo a cierta disposición en el verso: "Dirige tu rostro hacia la verdadera religión, que es únicamente para Allah. Esta es la naturaleza que Dıos ha dado a los hombres en su origen."(Surat al-Room, 30). La disposición del género humano es de ser sirvientes de Allah y tener fe en Él. Pues el hombre es incapaz de alcanzar sus ilimitados deseos y necesidades por si mismo, el naturalmente necesita humillarse ante Allah y acercarse a Él.
Si los individuos viven de acorde a esta disposición, entonces alcanzan verdadera confianza, paz, felicidad y salvación. Si él niega esta disposición y se aleja de Allah, gasta su vida en sufrimiento, temor, ansiedad y aflicción.
Esta regla, que es verdad para el hombre, también es una verdad para las sociedades. Si una sociedad está formada por gente que cree en Allah, esta se convierte en una sociedad justa, pasiva, feliz y sabia. Sin lugar a dudas, lo opuesto también es una verdad. Si una sociedad no es conciente de Allah, entonces la orden de tal comunidad es básicamente ruin, corrupta y primitiva.
Cuando las sociedades que se han alejado de Allah son examinadas, este hecho se ve fácilmente. Uno de los resultados más importantes de las creencias antirreligiosas es la abolición del concepto de moralidad y el desarrollo de sociedades completamente corruptas. Transgrediendo normas morales y religiosas, y centrándose exclusivamente en la satisfacción de deseos humanos, esta cultura es un sistema de opresión en todo el sentido de la palabra. En tal sistema, todo tipo de degeneraciones desde perversión sexual a la adicción de drogas son alentadas. Eventualmente, se han desarrollado sociedades que son devotas al amor humano y que son egoístas, ignorantes, superficiales y sin sentido.
En una sociedad donde la gente vive solo para la satisfacción de sus propios deseos, es seguro que no es posible mantener la paz, amor y amistad. En semejante sociedad, las relaciones humanas dependen de los intereses mutuos. Y un profundo sentimiento de desconfianza prevalece. Cuando no hay razón para que la gente sea sincera, honesta, confiable o de buen comportamiento se da el disimulo, la falsedad o el engaño. Los miembros de tal sociedad han "alejado a Allah de sus vidas detrás de sus espalda (con desdén)" (Surah Hud, 92)y así nunca conocen el temor a Allah. Pues no pueden "hacer una estimación justa de Allah", no son concientes del día del juicio y del día de las cuentas. Para ellos el infierno no es más que una idea que aparece en los libros religiosos. Ninguno de ellos piensa que tengan que rendir cuentas enfrente de Allah después de su muerte por todos los pecados que han cometido durante sus vidas en este mundo, o que finalmente serán destinados a vivir eternamente en el tormento del infierno. Aun si piensan acerca de esto, suponen que entraran al paraíso después de "pagar todos sus pecados", como se expresa en el verso siguiente:
Eso es, porque ellos dicen: "El fuego no nos tocará sino por unos cuantos días determinados," y se engañaron en su religión a causa de sus propias mentiras. (Surat Al-Imran, 24).
Así es como ocupan toda su vida haciendo lo mejor con tal de satisfacer sus propios deseos y necesidades.
Esta situación naturalmente trae un degeneración ética y un colapso moral que vemos hoy en día en muchas sociedades. En su propio razonamiento ellos suponen "hemos venido a este mundo solo por una vez, y viviremos por 50 ó 60 años y luego moriremos, por lo que debemos obtener lo mejor que esta vida nos da". El sistema de pensamiento basado en este erróneo razonamiento trae todo tipo de injusticia, prostitución, robo, crimen, e inmoralidad. Alguien que este en esto estará envuelto en todo tipo de crímenes, homicidios o fraudes. Cuando cada individuo piensa en nada excepto la satisfacción de sus propias necesidades y deseos, todos los demás incluyendo su familia y amigos, tienen importancia secundaria. Otros individuos en la sociedad no importan.
En una estructura social que descansa sobre relaciones interesadas a un gran grado, la desconfianza mutua de la gente obstaculiza la formación de paz en ambos niveles social e individual y ocasiona que la gente viva permanentemente en un estado de duda, frustración e irresolución. Sin saber por quien, cuando o como malas acciones se han de cometer en tal sociedad. Espiritualmente la gente vive en una condición de gran temor y angustia. Desconfianza general y sospecha que los conducen a vidas muy infelices. En una sociedad donde todos los tipos de valores morales no se toman en cuenta, las perspectivas de la gente en nociones como la familia, honestidad y castidad son algo alarmantes, porque no tienen temor a Allah.
En tales sociedades, las vidas de la gente no dependen del amor y respeto mutuo. Sus miembros no sienten la necesidad de sentir respeto entre ellos. No muestran una actitud de cuidado entre ambos sin un buen motivo. En si, ellos están en lo correcto según su ignorante razonar, para comportarse de esta manera. Se les enseña a través de sus vidas que han evolucionado de animales y que sus almas se perderán después de que mueran. Por ello consideran que no tiene sentido respetar el cuerpo que se origino de un mono, que se pudrirá debajo de la tierra y que nunca lo verán nuevamente. En su lógica corrupta, "todos los otros así como ellos mismo morirán y serán enterrados bajo tierra, sus cuerpos decaerán y sus almas desaparecerán. Por ello, porque deberían de molestarse en hacer el bien a otras personas, y sacrificarse?". Es si estos pensamientos se impregnan en el inconsciente de todos los que no tienen fe en Allah, y en el más allá. En sociedades sin fe en Allah, no hay bases para la paz, felicidad o confianza.
El propósito de todo lo que hemos dicho no es sugerir que "la degeneración ocurre en sociedades que no creen en Allah y que por ello se debe creer en Allah" se debe creer en Allah porque existe y cualquiera que Lo niegue comete un gran pecado delante de Él. Nuestra intención no es poner énfasis que las sociedades que no creen en Allah se vuelven corruptas, sino enfatizar que los puntos de vista fundamentales de estas sociedades están equivocados. Puntos de vista equivocados conducen a consecuencias enfermas. Una sociedad que comete el más grande pecado de negar a Allah, de hecho ha de sufrir los peores resultados. Estos resultados merecen atención porque muestran lo equivocada que está esta sociedad.
La característica común de tales sociedades es el estar engañadas por completo. Como se revela en el verso, "y si tú obedecieras a la mayoría que están sobre la tierra, te extrañarías del camino de Allah. (Surat al-Anaam, 116), cuanto más una sociedad comparte un carácter común esto crea una "masa", psicológicamente esto refuerza la ya existente falta de fe. Allah describe a tales sociedades como "ignorantes" en el Corán. Aun cuando los miembros de esta sociedad estudien física, historia, biología o ciencias similares, no poseen el sentido y conciencia para entender el poder y la fuerza de Allah. Y ellos son ignorantes en ese sentido. Porque los miembros de una sociedad ignorante no son devotos de Allah, ellos se alejan de Su camino en diferentes maneras. Ellos siguen a gente que son sirvientes incompetentes de Allah, al igual que ellos, tomándolos como ejemplos y aferrándose a sus ideas como verdades absolutas. En ultima instancia una sociedad ignorante termina como una sociedad cerrada que se ciega a si misma, llegando más y más lejos se divorcian de la razón y conciencia. Como hemos dicho al inicio, los aspectos más notables de este sistema es que los miembros de tales sociedades actúan de acorde a las doctrinas antirreligiosas.
Allah describe en el Corán con una sorprendente parábola como semejante vida, esta destinada a arruinarse pues descansa sobre bases vanas y corruptas:
¿Cuál es preferible?, ¿El que ha fundado un edificio sobre la piedad y la complacencia de Allah, o el que ha fundado un edificio al borde de un acantilado pronto a desplomarse y que se desplomó con él en el fuego del infierno?. Pues Allah no guía a los injustos. (Surat at-Tawba, 109)
Aún hay otro punto que recordad: toda sociedad y toda persona tiene la oportunidad de deshacerse de la adoctrinación, filosofía y estilo de vida de ignorancia. Allah les manda mensajeros que les adviertan e informen de la existencia de Alalh y del más allá y que les dicen el verdadero significado de la vida. Y junto a Sus mensajeros Él envía libros moralmente buenos que responden a todas las preguntas que derivan de la conciencia de la gente. Esta es la ley de Allah que ha existido desde la eternidad. En nuestros días, la guía para toda la gente es el Corán, que muestra el camino correcto y guía a la gente desde la oscuridad a la luz. La gente será juzgada de acuerdo a sus propias preferencias. El Mensajero que trajo el libro a la gente así les advierte:
Di: "¡Oh gente! Os ha llegado la verdad proveniente de vuestros Señor. El que se guía, se guía para sí mismo, y el que se extravía, lo hace para su propio mal y yo no puedo ser defensor de vosotros". (Surah Yunus, 108)