(78 … "¿Quién dará vida a unos huesos convertidos en polvo?"
(79) Di: "Aquel que los creó por vez primera les dará vida [de nuevo], ya que Él conoce bien cada [aspecto de la] creación:
Sura 36: Ia Sin (Oh Tú, Ser Humano)
La resurrección es una recreación de la vida después de la muerte. La muerte no significa el cese de la existencia. El mundo, que Dios ha creado para poner al hombre a prueba, servirá para determinar su porción en el más allá. Después de morir, cada alma será recreada en un nuevo cuerpo y comenzará su vida en el más allá, donde Dios lo colocará en el infierno o en el paraíso, dependiendo de sus acciones en este mundo. La resurrección de la humanidad es una tarea fácil de acometer para Dios. En la siguiente aleya se describe la resurrección de todo el mundo a la vez el Día del Juicio Final:
(43) Realmente, somos Nosotros quienes damos la vida y damos la muerte; y hacia Nosotros será el retorno (44) el Día en que la tierra se abra a su alrededor mientras acuden prestos [al juicio de Dios]: esa reunión será fácil [de abarcar] para Nosotros.
Sura 50: (Qaf)
Algunas personas dudan de que Dios pueda resucitar al hombre después de su muerte. Sin embargo, fue Dios quien en un principio creó al hombre de la nada y, por consiguiente, tiene sin duda el poder de devolverlo de nuevo a la vida. Dios nos informa de este hecho en el Corán:
(5) ¡Oh Gentes! Si dudáis de la [verdad de la] resurrección, [recordad que,] en verdad, os creamos [a cada uno de vosotros] de tierra, luego de una gota de esperma, luego de una célula germen, luego de una masa embrionaria, completa [en sí misma] y sin embargo incompleta, para haceros claro [vuestro origen].
Y hacemos que lo que hemos dispuesto [que nazca] permanezca en los úteros por un plazo fijado [por Nosotros], y luego os hacemos salir como niños y [os dejamos vivir] para que [algunos] alcancéis la madurez: pues de vosotros hay quienes mueren [en la infancia], y muchos de vosotros quedan reducidos en la vejez a un estado de lo más abyecto, en el que dejan de saber lo que una vez tan bien supieron.
Y [Oh hombre, si aún dudas de la resurrección, considera esto:] puedes ver la tierra reseca y muerta --mas cuando hacemos caer agua sobre ella, [enseguida] rebulle y se hincha, y hace brotar toda clase de hermosas plantas.
(6) Así es, porque sólo Dios es la Suprema Verdad, y porque sólo Él da vida a los muertos, y porque Él tiene el poder para disponer cualquier cosa.
Sura 22: Al-Hach (La Peregrinación)
Para poner un ejemplo de esta recreación, Dios llama nuestra atención sobre un fenómeno natural cercano a nosotros. Después de la lluvia Dios revive el árido y estéril suelo donde no crecía nada para que se vuelva productivo de nuevo. De modo similar, devolver al hombre a la vida después de muerto resulta algo fácil para Dios:
(57) Y es Él quien envía los vientos como anuncio de la proximidad de Su gracia --para que cuando arrastran nubes pesadas, las conduzcamos a una tierra muerta y hagamos que descienda de ellas agua; y por medio de ella hacemos salir toda clase de frutos. De igual forma, haremos salir a los muertos: [esto] deberíais mantenerlo presente.
Sura 7: Al-Aaraf (La Facultad del Discernimiento)
Todo es fácil para Dios. El Corán afirma que la creación o resurrección de la humanidad es como la de una sola persona:
(28) [Para Él,] la creación y la resurrección de todos vosotros es como [la creación y la resurrección de] un solo individuo: pues en verdad, Dios todo lo oye, todo lo ve.
Sura 31: (Luqmán)
— (12) esos que [desdeñosamente] preguntan: "¿Cuándo llegará ese Día del Juicio?"
Sura 51: Ad-Dariyat (Los Vientos Que Arrastran)
(5) ¡Realmente, lo que os ha sido prometido es sin duda la verdad, (6) y, realmente, el juicio ha de llegar!
Sura 51: Ad-Dariyat (Los Vientos Que Arrastran)
Dios hace al hombre responsable de sus actos. A cada persona, que ha sido puesta a prueba en este mundo, se la llamará para que dé cuenta de ellos el Día del Juicio Final. Ese día, se percatará de que nada ha permanecido oculto a Dios y que todo lo bueno o malo que haya hecho se pondrá al descubierto:
--(16) el Día en que surjan [de las tumbas], sin que nada de ellos esté oculto a Dios.
¿De quién será la soberanía en ese Día?
¡De Dios, el que tiene dominio absoluto sobre todo lo que existe!
(17) Ese Día cada ser humano será retribuido con lo que se haya ganado: no [habrá] injusticia en ese Día: ¡ciertamente, Dios es rápido en ajustar cuentas!
El hombre no siempre recibe el castigo que merece en este mundo. Dios da una prórroga a algunos, aunque nos informa de que, en el más allá, Les hará pagar por todas sus malas acciones. Siendo éste el caso, no resulta muy acertado que los que cometen actos ilícitos piensen que han evadido su castigo simplemente porque han conseguido escapar a la ley y no se les ha castigado en este mundo. El Día del Juicio Final comprobarán que el hombre no le puede esconder nada a Dios. Por su nombre “Al Hafiz” (El que guarda todas las cosas con gran detalle), Dios conoce cada movimiento que hace el hombre y ordena a Sus ángeles que lo registren. Dios nos informa de esto en el Corán:
(17) [Y así,] cada vez que se encuentran cara a cara las dos exigencias [de su naturaleza], enfrentadas una a la derecha y otra a la izquierda, (18) no pronuncia palabra sin que haya junto a él un vigilante, siempre presente.
Sura 50: (Qaf)
Dios, que conoce todo hasta el más mínimo detalle, que es testigo de cada momento de nuestras vidas, digamos una palabra en voz alta o la guardemos en el corazón, nos juzgará justamente el Día del Ajuste de Cuentas, cuando se conozca por completo el atributo que define a Dios como Justo:
(47) Pero dispondremos balanzas justas en el Día de la Resurrección, y ningún ser humano será tratado injustamente en lo más mínimo: pues aunque hubiera [en él sólo] el peso de un grano de mostaza [de bien o de mal], lo tendríamos en cuenta; y ¡nadie lleva las cuentas tan bien como Nosotros!
Sura 21: Al-Anbiya’ (Los Profetas)
Dios, el Justo, es infinitamente misericordioso y benévolo con Sus siervos. Dios promete a los que hagan una buena acción que recibirán diez como ella, mientras que el que cometa una mala acción únicamente recibirá lo que merezca:
(160) Quien se presente [ante Dios] con una buena acción recibirá una recompensa diez veces mayor; pero quien se presente con una mala acción será retribuido sólo con otro tanto: y nadie será tratado injustamente.
Sura 6: Al-Anaam (El Ganado)
Cuando llegue el ajuste de cuentas, se conducirá a la gente bien al paraíso bien al infierno, dependiendo del lado por el que reciban sus libros:
(7) Y aquel cuyo registro le sea entregado en su mano derecha, (8) habrá de tener un ajuste de cuentas fácil, (9) y volverá dichoso con los de su misma clase.
(10) Pero aquel cuyo registro le sea entregado detrás de su espalda, (11) llegará a implorar la aniquilación: (12) pero entrará en las llamas abrasadoras.
(13) Ciertamente, [en su vida terrenal] vivió alegre entre gente de su misma clase --(14) pues, ciertamente, jamás pensó que habría de regresar [a Dios].
(15) ¡Claro que sí! ¡Su Sustentador le veía perfectamente!
Sura 84: Al-Inshiqaq (El Resquebrajamiento)