Hasta mediados del siglo XX en todo el mundo prevaleció el criterio de que el universo era infinito, que existió y existirá siempre. Según este punto de vista, conocido como “modelo de universo estático”, el cosmos carecía de principio y fin.
La idea de que era un conjunto de substancias fijas, estáticas e inmodificables constituyó el fundamento de la filosofía materialista que condujo al rechazo de la existencia de un Creador. Pero con el avance de la ciencia y la tecnología en el siglo XX, el modelo de universo estático quedó completamente eliminado y se nos presenta un nuevo amanecer. A través de numerosos experimentos, observaciones y cálculos realizados por algunas de las mentes más prominentes del mundo, la física moderna ha comprobado que el universo sí tuvo un comienzo y que pasó a existir de la nada en un momento singular por medio de una gran explosión. Por otra parte, se estableció que no es fijo y estático como sostienen obstinadamente los materialistas. Por el contrario, sobrelleva un proceso de constante movimiento, cambio y expansión. Estas realidades establecidas hace poco, produjeron el efecto de un terremoto devastador sobre la teoría del universo estático. Los nuevos criterios ya se aceptan sin discusión por parte de la comunidad científica.
El origen del universo es descrito en el Corán en el siguiente versículo:
El es el Originador de los cielos y la tierra... (Corán 6:101)
Esta información suministrada por el Corán está en un todo de acuerdo con los descubrimientos de la ciencia contemporánea. Como dijimos antes, la conclusión a la que la astrofísica ha llegado actualmente es que la totalidad del universo, junto con las dimensiones de espacio y tiempo, se manifestaron como resultado de una gran explosión que ocurrió fuera del acontecer temporal. Este evento conocido como el Big Bang, demuestra que el universo fue creado de la nada como resultado de la explosión de un solo punto.
La realidad que se presentaba antes del Big Bang sólo podría describirse metafísicamente pues la materia, el espacio, la energía e incluso el tiempo, fueron creados a posteriori de la gran explosión en un instante. Este hecho, descubierto sólo recientemente por la física moderna, nos fue anunciado en el Corán hace 1400 años.
1.Las regiones de color marrón oscuro representan la radiación de fondo 2. Las regiones de color rosa claro son las calientes 3. Las regiones de color rosa intenso son las más calientes 4. Las regiones de color marrón claro son las frías | |
Los sensores ubicados a bordo del satélite espacial COBE lanza- do por la NASA en 1992 captura- ron evidencias remanentes del Big Bang. Este descubrimiento permitió probar la existencia de esa Gran Explosión, que es la explicación científica de la crea- ción del universo de la nada. |
Georges Lemaitre |
En el Corán, revelado hace catorce siglos en una época en que la ciencia astronómica era todavía muy primitiva, la expansión del universo está descripta de esta forma:
Nosotros hemos construido el cielo con fuerza, y ciertamente lo estamos expandiendo .(Corán 51:47)
La palabra “cielo”, refiriéndose al “espacio” y al “universo”, se usa con este sentido en el versículo de arriba y en una serie de otros. En consecuencia, expresa que el universo se expande. La palabra árabe musi’una en inna lamusi’una (“Es El Quien lo expande rápidamente”), proviene del verbo awsa’a, que significa “expandir”. El prefijo “la” enfatiza el nombre o título que le sigue y le agrega el sentido de “en sumo grado”. Por lo tanto esta expresión significa: “Nosotros expandemos el cielo o el universo en sumo grado”. A esa conclusión es a la que llegó, precisamente, la ciencia actual.
Hasta principios del siglo XX la opinión prevaleciente en el ámbito científico era que “el universo posee una naturaleza constante y ha existido desde siempre”. No obstante, las investigaciones, observaciones y cálculos realizados con la tecnología moderna han revelado que el universo tuvo un comienzo y se “expande” constantemente.
A comienzos del siglo XX el físico ruso Alexander Friedmann y el cosmólogo belga Georges Lemaître calcularon teóricamente que el universo estaba en constante movimiento y expandiéndose.
Este hecho fue probado también por medio de la observación en 1929. El astrónomo norteamericano Edwin Hubble descubrió, al atisbar el cielo con un telescopio, que las estrellas y las galaxias se alejan constantemente unas de otras. Esto es considerado el descubrimiento más grande en la historia de la astronomía. Hubble estableció durante ese hallazgo que las estrellas emitían luz que se tornaba cada vez más roja. De acuerdo a las leyes físicas conocidas, la luz de un cuerpo que se acerca al punto de observación se vuelve violeta, en tanto que la de un cuerpo que se aleja toma un matiz rojizo. El científico advirtió en esas inspecciones del cielo la tendencia al color rojo de la luz emitida por las estrellas. Es decir, éstas, al igual que las galaxias, se alejan cada vez más del punto de observación e incluso unas de otras. Un universo en donde cada cosa se distancia constantemente de las demás, implica un universo en permanente expansión. Los estudios llevados a cabo en los años siguientes verificaron su dilatación sin interrupción.
Edwin Hubble con su telescopio gigante. | Desde el momento del Big Bang el universo ha estado expandiéndose a gran velocidad. Los científicos comparan la expansión del universo con la superficie de un globo que es inflado. |
Con el objeto de comprender esto con mayor claridad, imaginemos que la superficie del universo es como la de un globo de goma que es inflado. Así como cada punto de éste se aleja uno del otro al irse inflando, lo mismo sucede con los cuerpos celestes en tanto se sigue dilatando el cosmos. Esto fue descubierto teóricamente por Alberto Einstein, considerado uno de los científicos más grandes del siglo XX. Pero este estudioso dejó a un lado su hallazgo para evitar violar el “modelo de universo estático” aceptado normalmente hasta entonces. Tiempo después describió esa actitud suya como el más grande desatino de su vida.1
Dicha realidad fue explicada en el Corán cuando aún era desconocida para los humanos. Una prueba más de que el Corán es la Palabra de Dios, el Creador y el Gobernante del universo.
La figura representa al Big Bang, que reveló una vez más que Dios creó el universo de la nada. Lo comprobado científicamente respecto a la Gran Explosión ha hecho que sea ésta la teoría aceptada, aunque algunos estu- diosos tratan de proponer otras hipó- tesis alternativas. |
Otro versículo sobre la creación de los cielos es el siguiente:
¿No ven los incrédulos que los cielos y la tierra estaban unidos (formando un todo homogéneo, una unidad de creación [ratq]) y los separamos? ¿E hicimos del agua toda cosa viviente? ¿Es que no creerán? (Corán, 21:30)
La palabra ratq traducida como “unidos”, “cosidos” significa “mezclados, combinados” según los diccionarios árabes. Se utiliza para referirse a dos sustancias diferentes que conforman un todo. La frase “los separamos” es el verbo fataqa en árabe, e implica algo que se produce como resultado de descombinar o separar la estructura de cosas que estaban unidas entre sí. Una de las acciones a las cuales se aplica este verbo es al brote de un vástago del suelo por la germinación de una semilla.
Miremos de vuelta el versículo teniendo en mente esta información. En el texto el cielo y la tierra están en principio sujetos al estado de ratq. Son separados luego saliendo uno del otro. Y sorprendentemente, cuando consideramos los primeros momentos del Big Bang, encontramos que toda la materia del universo estaba reunida en un solo punto. En otras palabras, todo, incluyendo “los cielos y la tierra” que todavía no habían sido creados, estaban entrelazados, combinados en una condición inseparable. Entonces este punto explotó violentamente provocando que su materia se desuniera.
El ha creado los cielos y la tierra con la verdad. El enrolla (envuelve) la noche en el día, y envuelve el día en la noche. (Corán 39:5)
Las palabras utilizadas en el Corán para describir el universo son realmente notables. El término árabe que se traduce aquí como “enrollar” (o “envolver”) es yukawwir. En español significa “hacer que una cosa sea envuelta por otra, plegándola como si fuera una tela extendida” (Por ejemplo, en los diccionarios árabes, esta palabra es utilizada para la acción de enrollar una cosa alrededor de otra, en la forma en que se arma un turbante).
La descripción que da el versículo sobre el día y la noche envolviéndose mutuamente implica una información precisa sobre la forma del mundo. Esto sólo puede ser verdad si la tierra es redonda. Lo cual significa que en el Corán, revelado en el siglo VII, la redondez de la tierra se encontraba ya insinuada.
Es preciso no olvidar que en aquella época la astronomía concebía al mundo de manera diferente: se pensaba que era una superficie plana y todos los cálculos y explicaciones científicas se basaban en esta convicción. No así el Corán, que siendo la Palabra de Dios, utiliza términos más precisos cuando se ocupa de describir el universo. Comunicó así estos hechos, que recién se convalidaron en siglos recientes, hace más de 1400 años.
Dios llama nuestra atención en el Corán sobre un importante atributo del cielo:
Hemos hecho del cielo un techo protegido, pero no obstante ellos se desvían de Nuestros Signos (Corán 21:32).
Esta propiedad del cielo ha sido descubierta por la ciencia en el siglo XX. La atmósfera que rodea la tierra cumple funciones importantes en la conservación de la vida. Al destruir por la fricción muchos meteoros, grandes y pequeños, que se aproximan a la tierra, impide que estos lleguen al suelo y dañen a los seres vivientes.
Además, la atmósfera filtra las radiaciones provenientes del espacio exterior que son perjudiciales para la vida. Su característica más sorprendente es que sólo permite que pasen a través de ella radiaciones inocuas y útiles, como la luz visible, la radiación ultravioleta de baja longitud de onda y las ondas de radio. La radiación ultravioleta de baja longitud de onda, que la atmósfera deja entrar sólo parcialmente, es muy importante para la fotosíntesis de las plantas y para la supervivencia de todos los seres vivos. La mayoría de la radiación ultravioleta intensa emitida por el sol es filtrada por la capa de ozono y sólo una parte limitada —y esencial— de su espectro alcanza la tierra.
This illustration shows meteors that are about to crash into the earth. The celestial bodies wandering in space could pose a serious threat to the Earth. Yet, God, He Who creates most perfectly, has made the atmosphere a protective roof. Thanks to this special protection, most meteoroids do not harm the Earth, as they fall to pieces in the atmosphere. |
La función protectora de la atmósfera no termina allí: también ampara a nuestro planeta del intenso frío del espacio exterior que llega aproximadamente a — 270 °C (— 454 °F). Pero además existe una capa originada por el campo magnético de la Tierra, llamada cinturón (o cinturones) de Van Allen, que sirve asimismo como escudo contra la radiación perjudicial emitida por el sol y otras estrellas, mortal para los seres vivos. Los masivos y frecuentes estallidos de energía llamados erupciones solares destruirían todo lo orgánico en nuestro planeta si no existiera el cinturón de Van Allen.
El Dr. Hugo Ross ha señalado la importancia del cinturón de Van Allen en nuestras vidas:
La Tierra tiene mayor densidad que cualquiera de los planetas del sistema solar. Su gran núcleo de hierro-níquel es la causa de nuestro gran campo magnético, que es el que produce el escudo de Van Allen. De ese modo la tierra queda protegida de la radiación proveniente del espacio exterior. Si este escudo no estuviera presente, sería imposible aquí la vida. El único planeta con un campo magnético similar al nuestro pero 100 veces menos potente, es Mercurio, en tanto que Venus carece de campo magnético. El escudo de Van Allen es un diseño único para la tierra.2
La energía liberada solamente por una de las erupciones solares detectada en años recientes, fue calculada equivalente a la explosión de 100 mil millones de bombas atómicas como la arrojada sobre Hiroshima. Cincuenta y ocho horas después de la erupción se pudo observar que las agujas de las brújulas realizaban movimientos inusuales y que la temperatura a 250 kilómetros (155 millas) por encima de la atmósfera se elevaba a 2.500 °C (4.532 °F).
La magnetosfera, formada por el campo magnético de la Tierra, sirve como escudo pro- tector del planeta respecto de otros cuerpos celestes, rayos cósmicos y partículas. En la figura de arriba puede verse la magnetosfera, también llamada Cinturones de Van Allen. Estos cinturones, ubicados a miles de kilómetros por encima de la superficie de la Tierra protegen a los seres vivos de la fatal energía de los rayos cósmicos y el viento solar que de lo contrario les llegaría del espacio. Todos estos descubrimientos científicos prueban que el mundo está protegido de una manera muy particular. Y lo importante es que esta protección fue dada a conocer en el Corán en el versículo "Hemos hecho del cielo un techo protegido..." hace 1400 años. |
En resumen: a nuestro mundo lo protege de amenazas externas un sistema perfecto que funciona a gran altura. Lo notable es que Dios nos informó en el Corán de ello hace muchos siglos.
La mayoría de la gente que observa el cielo no repara en la propiedad protectora de la atmósfera. Casi nunca piensan qué tipo de lugar sería el mundo si esta estructura no existiera. La foto superior pertenece a un cráter gigante provocado por un meteoro que cayó en Arizona, EEUU. Si no existiera la atmósfera, millones de meteoritos caerían sobre la Tierra y ésta se volvería un lugar inhabitable. Pero la propiedad protectora de la atmósfera permite la supervivencia de lo orgánico. Es por cierto un favor de Dios para los seres humanos y un milagro proclamado en el Corán. |
En el Corán el versículo 11 de la Sura Al-Târiq [86] se refiere a la función “retornadora” del cielo:
¡Por el cielo y sus sistemas cíclicos [raÿ']! (Corán 86:11)
La palabra interpretada como “cíclico” raÿ‘, en las traducciones del Corán tiene también los significados de “devolver” y “retornar”.
Como se sabe, la atmósfera que rodea la Tierra está compuesta de muchas capas. Cada una de ellas cumple un rol fundamental en beneficio de la vida. Las investigaciones han revelado que tienen la función de retornar los materiales o radiaciones a que están expuestas al espacio exterior o de vuelta a la superficie del planeta, actuando como una “pantalla reflectora”. Veamos ahora algunos pocos ejemplos de esta función “retornadora” de esas capas que nos circundan.
La troposfera, ubicada entre los 13 y 15 kilómetros (entre 8 y 9,3 millas) de altura, permite que el agua se vaporice desde la superficie terrestre para condensarse y convertirse en lluvia.
La capa de ozono, la más baja de la estratosfera y a una altitud de 25 kilómetros (15,5 millas), refleja al espacio la radiación dañina y la luz ultravioleta.
La ionosfera refleja las señales de radio provenientes de la Tierra y las devuelve a la superficie exactamente como lo haría un satélite de comunicaciones estacionario. Esto es lo que hace posible la comunicación inalámbrica y las emisiones de radio y televisión a grandes distancias.
La magnetosfera rechaza hacia el espacio exterior los rayos cósmicos y la radiación nociva emitida por el Sol y otras estrellas antes de que alcancen la superficie de la Tierra.
Esta propiedad de las capas de la atmósfera, que sólo se ha descubierto en años recientes, fue anunciada hace siglos por el Corán, demostrando de nuevo que es la Palabra de Dios.
La presencia de agua es esencial para la vida en la tierra. Uno de los factores actuantes en la producción de la lluvia es la troposfera, una de las capas de la atmósfe- ra. La troposfera permite que el vapor de agua que se eleva de la super- ficie de la tierra se con- dense y retorne en for- ma de lluvia. | Cada capa de la atmós- fera tiene efectos benefi- ciosos para los seres humanos. La ionosfera por ejemplo, una de las capas superiores de la atmósfera, refleja de vuelta hacia la superficie las ondas de radio emiti- das por un cierto centro emisor, y de esta mane- ra permite que las trans- misiones sean recibidas desde largas distancias. | Each layer of the atmosphere has beneficial attributes for human beings. The Ionosphere layer, one of the upper layers of the atmosphere, for example, reflects radio waves broadcast from a certain centre back down to the Earth, thus enabling broadcasts to be received from long distances. |
El Corán expone la similitud de los siete estratos geológicos de la Tierra con los siete estratos en el cielo:
Dios es Quien ha creado siete cielos y otras tantas tierras. La orden desciende gradualmente entre ellos para que sepáis que Dios es omnipotente y que Dios todo lo abarca en Su ciencia. (Corán, 65:12)
Primer estrato: Litosfera (agua).
Segundo estrato: Litosfera (tierra).
Tercer estrato: Astenosfera.
Cuarto estrato: Manto exterior.
Quinto estrato Manto interior.
Sexto estrato: Parte externa del núcleo o corazón.
Séptimo estrato Parte interna del núcleo o corazón
Litosfera se deriva del griego “lithos” (piedra). Se trata del estrato más superficial en el planeta y es delgado en comparación con los otros. Bajo los océanos es aún más delgado y sufre actividad volcánica. Término medio su grosor es de 80 kilómetros (49,7 millas). Es más frío y duro que los demás y constituye la carcasa de la Tierra.
Por debajo de la litosfera se encuentra el estrato astenosfera, término que proviene del griego “asthenes” (débil). Es más delgado y movedizo que la litosfera. Se formó con substancias semisólidas que seguramente se fundieron al quedar expuestas a temperaturas y presiones elevadas en las distintas épocas geológicas. Se cree que la litosfera, más dura, flota o se mueve sobre la astenosfera que se desplaza más lentamente.3 Por debajo de estos dos estratos se encuentra el manto, con un grosor de unos 2.900 kilómetros (1.800 millas), constituido por rocas semisólidas con más hierro, magnesio y calcio que la corteza. También es más caliente y denso que ésta, pues la temperatura y densidad aumentan con la profundidad.
En el centro del planeta está el núcleo o corazón con mayor proporción de metales (mezcla de hierro-níquel) que roca, lo que lleva su densidad aproximadamente al doble que la del manto. Como dijimos, el núcleo terrestre consta de dos partes. La líquida y ubicada en el exterior tiene un grosor de 2.200 kilómetros (1.370 millas). La sólida ubicada en el interior tiene un grosor de 1.250 kilómetros (777 millas). La líquida es la que provee al planeta el campo magnético mientras rota.
La realidad de esta similitud entre las capas del cielo y los estratos geológicos, recién identificados con la tecnología del siglo XX, sin duda marca otro milagro científico del Corán.
El versículo dice que las montañas cumplen la función de evitar sacudidas en la Tierra. Esto era totalmente desconocido en la época de la revelación del Corán y recién se supo como resultado de las investigaciones geológicas modernas.
Antes se pensaba que las montañas eran solamente protuberancias que se elevaban sobre la superficie terrestre, hasta que los científicos descubrieron que sus partes conocidas como raíces se hundían por debajo de la superficie con una extensión 10 a 15 veces superior a la parte exterior. En consecuencia, las montañas juegan un papel similar al de un clavo o estaca que sostiene firmemente una tienda de campaña. Por ejemplo, el Monte Everest, con una altura de unos 9 kilómetros, posee una raíz que supera los 125 kilómetros (77,7 millas).4
Las montañas aparecen como resultado de los movimientos y colisiones de las placas que forman la corteza terrestre. Al colisionar dos de ellas, la más fuerte se desliza y se extiende profundamente por debajo de la otra que se comba y forma las montañas.
Un texto científico describe así su estructura:
Donde los continentes tienen más espesor, como en las cadenas montañosas, la corteza se hunde más profundamente en el manto.5
El profesor Siaveda, renombrado geólogo especialista de zonas submarinas, dijo lo siguiente respecto a la manera en que las montañas se presentan como la copa de un árbol vinculada a sus raíces:
Mountains have roots deep under the surface of the ground. (Earth, Press and Siever, p. 413) | |
Esquema de un corte transversal. Las montañas, como las estacas, tienen profun- das raíces empotradas en el suelo (Anatomía de la Tierra, Cailleux, p. 220) | |
Esta otra ilustración muestra que las montañas tienen forma de estacas debido a sus profundas raíces sumergidas (Ciencia de la Tierra, Tarbuck y Lutgens, p. 158). |
La diferencia fundamental entre las montañas continentales y las submarinas yace en el material que las constituye… Pero el denominador común de ambas reside en las raíces que las sostienen. Tanto las continentales como las submarinas tienen raíces con material de baja densidad… Por lo tanto, la función de las raíces es sostener las montañas de acuerdo con la ley de Arquímedes.6
Por otra parte, el libro Tierra, usado durante años como libro de texto en muchas universidades y escrito por el anterior presidente de la Academia nacional de Ciencias doctor Frank Press, dice que las montañas son como estacas enterradas profundamente.7
En otros versículos se compara a ese papel de las montañas con el de las "estacas":
¿No hemos hecho de la tierra lecho y de las montañas estacas? (Corán, 78:6-7)
En otro versículo se revela que Dios fijo las montañas (Corán, 79:32). La palabra arsaahaa significa aquí "fue enraizada, fijada, clavada en la tierra". Del mismo modo, las partes de la montaña que se extienden por arriba y por debajo de la superficie también están "clavadas" una con otra, lo que lleva a que fijen la corteza terrestre y eviten que se deslice sobre el magma y entre los estratos. En resumen, se puede comparar a las montañas con los clavos que mantienen unidos dos pedazos de madera. El efecto de fijación de las montañas es conocido como isostasia en la literatura científica. Se denomina así al equilibrio entre la fuerza hacia arriba creada por el manto y la fuerza hacia abajo creada por la corteza terrestre. Por un lado, la montaña pierde masa debido a la erosión (desprendimiento de tierra o derretimiento de glaciares), mientras que por otra parte gana masa mediante la formación de nuevos hielos o de nuevas capas de tierra o piedra debido a las explosiones volcánicas. En consecuencia, al perder peso son empujadas hacia arriba en función de la presión ascendente implementada por los líquidos, pero al volverse más pesadas la fuerza de gravedad las empuja al interior del manto. A ese equilibrio entre ambas fuerzas se lo denomina isostasia. Esta propiedad de las montañas se describe así en una fuente científica:
G. B Airy sugirió en 1855 que la corteza terrestre se podía comparar con una balsa de madera que flota en el agua. Los pedazos gruesos de madera, en comparación con los pedazos delgados, tienen una mayor parte de su volumen por encima de la superficie. Del mismo modo, las partes de mayor espesor de la corteza terrestre sobresaldrán más sobre un líquido o un substrato plástico de mayor densidad. Airy estaba sugiriendo que las montañas tenían una raíz profunda de menor densidad rocosa y publicó su estudio e hipótesis cuatro años después. J. H. Pratt ofreció otra hipótesis alternativa… Columnas de roca de las montañas por debajo de la superficie, deben tener una densidad menor, debido a su mayor extensión, que las columnas cortas por debajo de las zonas de planicie. Ambas hipótesis implican que las superficies irregulares se equilibran por medio de densidades diferentes de las rocas por debajo de los principales caracteres distintivos (montañas y llanuras) de la corteza. Esta situación de EQUILIBRIO describe el concepto de ISOSTASIA.8
Hoy día sabemos que la capa externa pétrea de la superficie de la Tierra está hendida por profundos quiebres e imperfecciones. Dado que el planeta gira muy rápidamente sobre su eje, esas placas se moverían si no fuese por el efecto fijador de las montañas. Si se moviesen, no se formarían el suelo ni la superficie del planeta y el agua no se acumularía allí, las plantas no crecerían y no se podrían construir edificios ni caminos. En resumen, sería imposible la vida. Sin embargo, gracias a la misericordia de Dios, las montañas actúan como clavos y evitan, en gran medida, el movimiento de la superficie terrestre.
Este papel vital de las montañas, descubierto por los geólogos y sismólogos modernos, fue revelado en el Corán hace siglos, como ejemplo de la sabiduría suprema en la creación de Dios.
… Ha fijado en la tierra las montañas para que ellas y vosotros no vaciléis… (Corán, 31:10)
¡Creyentes! ¡Entrad todos en la Paz y no sigáis los pasos del Demonio! Es para vosotros un enemigo declarado. Quienes creyeron y quienes dejaron sus hogares, combatiendo esforzadamente por Alá, pueden esperar la misericordia de Alá. |
Se nos informa en un versículo coránico que las montañas no están inmóviles como parece, sino que están en constante movimiento.
Verás pasar a las montañas, que tú creías inmóviles, como pasan las nubes… (Corán, 27:88)
Este movimiento de las montañas es provocado por el desplazamiento de la corteza terrestre sobre la cual están ubicadas. La corteza terrestre “flota” sobre la capa del manto, que es más densa. El primero en sugerir que los continentes debieron estar todos unidos al principio y que luego flotaron a la deriva en diferentes direcciones separándose unos de otros fue el científico alemán Alfred Wegener (1880-1930). Los geólogos comprendieron que estaba en lo cierto recién en el decenio de 1980, cincuenta años después de su muerte. Como señaló Wegener;
La corteza y la parte más elevada del manto, con un espesor de unos 100 km., se divide en segmentos llamados placas. Hay seis placas mayores y varias menores. Según la teoría llamada ‘de las placas tectónicas’, éstas se desplazan sobre la Tierra y arrastran a los continentes y al lecho oceánico. Ese movimiento, estimado de 1 a 5 cm. por año, ocasiona que la geografía terrestre se modifique lentamente. Por ejemplo, año a año el Océano Atlántico se ensancha. 9
Las montañas se extienden tanto por debajo como por encima de la corteza terrestre y actúan como si fueran estacas que fijan y mantienen unidas las diferentes placas que se encuentran en constante movimiento. Esta propiedad "remachadora" de las montañas impide en gran medida las sacudidas. |
Te preguntarán acerca de combatir en el mes sagrado. Di: "Combatir en él es algo muy grave; pero [que se impida el acceso a] la Casa Inviolable de Adoración y expulsar de ella a su gente es aún más grave a los ojos de Dios, pues la opresión es más grave que matar." |
Hay algo que es muy importante señalar aquí: Dios se ha referido en el versículo al movimiento de las montañas como una acción de flotar a la deriva. Hoy día la ciencia moderna también usa el término “deriva de los continentes” para referirse al desplazamiento de los continentes.10
Es imposible que la deriva continental se haya podido observar en la época de la revelación coránica. Pero Dios indicó claramente cómo se lo debía entender: Verás pasar las montañas, que tú creías inmóviles… (Corán, 27:88). Correcto. Después describe una imagen al decir que pasan como nubes. Pero se llama la atención con toda claridad sobre el movimiento del estrato donde se encuentran fijadas las montañas.
Sin lugar a dudas es un gran milagro que esta realidad científica fuese descubierta por la ciencia sólo recientemente, aunque haya sido revelada en el siglo VII, cuando la concepción sobre la naturaleza del universo se basaba en las supersticiones y los mitos. Esta es otra prueba muy importante de que el Corán es la palabra de Dios.
Los Movimientos De Los Continentes | |
1. Hace 200 Millones De Años | 4. En La Actualidad |
Las figuras de la izquierda muestran la posición de los continentes en el pasado. Si asumimos que éstos continuarán moviéndose de la misma forma, dentro de millones de años estarán en la posición que se muestra en las figuras de la derecha. |
El hierro es uno de los elementos puestos de relieve en el Corán. En el capítulo “Hadid” (Hierro) se nos informa:
… Hemos hecho descender también el hierro, que encierra una gran fuerza y ventaja para los hombres… (Corán, 57:25).
Lingote de hierro |
Se podría pensar que la palabra anzalnaa, traducida aquí Hemos hecho descender también, usada para el hierro en el versículo, tiene un sentido metafórico para explicar que dicho metal fue concedido para beneficio de la gente. Pero al tomar en consideración el sentido literal de la palabra, es decir, “hecho descender físicamente desde el cielo”, como la lluvia y la luz solar, comprobamos que el versículo implica un milagro científico muy significativo.
Esto es así debido a que los modernos hallazgos astronómicos han descubierto que el hierro presente en nuestro mundo proviene de estrellas gigantes del espacio exterior.11
Todo el hierro existente en el sistema solar y no sólo el que hay en la Tierra proviene del espacio exterior, puesto que la temperatura en el sol es inadecuada para su formación. La temperatura del Sol en su superficie es de 6.000 °C (11.000 °F) y en el núcleo de 20 millones °C (36 millones °F). El hierro sólo pudo producirse en estrellas mucho más grandes que el Sol, donde las temperaturas alcanzan unos cuantos cientos de millones de grados. Cuando la cantidad de hierro excede de cierto nivel en una estrella, ésta ya no puede alojarlo y, eventualmente, explota provocando lo que se conoce como una “nova” o “supernova”. Dichas explosiones posibilitaron que el hierro sea despedido al espacio.12
Una fuente científica nos provee de la siguiente información sobre el tema:
También hay evidencia de sucesos en supernovas más antiguas. Niveles acrecentados de hierro-60 en la profundidad del sedimento marino ha sido interpretado como indicio de que hace unos 5 millones de años ocurrió la explosión de una supernova a una distancia del Sol dentro del lapso de 90 años-luz. El hierro-60 es un isótopo radioactivo de este metal con una vida media de 1,5 millones de años que se forma en las explosiones de las supernovas. Una mayor presencia de este isótopo en un estrato geológico indica la nucleosíntesis contemporánea de cuerpos simples en el espacio cercano y su posterior llegada a la Tierra (posiblemente como parte de las partículas de polvo estelar).13
Surat al-Hadid es la 57 a en el Corán. El valor numérico de la palabra "al- Hadid" en árabe es de 57. El valor numérico de "hadid" por su cuenta es de 26. Como puede verse en la tabla periódica a un lado, 26 es el número del áto- mo de hierro. Con el verso revelado en Surat al-Hadid Alá Todopoderoso indi- ca cómo el hierro forma, y con el código matemático que figura en el versículo nos revela un milagro científico.
Esto muestra que el hierro no se forma en nuestro planeta, sino que es proyectado en forma de meteoritos por estrellas que explotan, y luego "desciende" a la tierra exactamente de la misma forma como se manifiesta en el versículo. Queda claro que este hecho no podía ser conocido a nivel científico en el siglo VII, cuando el Corán fue revelado. No obstante, está relatado en este libro que es la palabra de Dios, Quien todo lo abarca en Su conocimiento infinito.
La astronomía también ha revelado que otros cuerpos simples se formaron en el exterior de nuestro planeta. En la expresión hemos hecho descender también el hierro, el término "también" puede estar refiriéndose a esa idea. Sin embargo, que el versículo mencione específicamente el hierro es totalmente sorprendente, considerando que estos descubrimientos fueron hechos a fines del siglo XX. El conocido microbiólogo Michael Denton enfatiza en su libro La Naturaleza del Destino la importancia del hierro:
De todos los metales no hay ninguno más esencial para la vida que el hierro. Es la acumulación del mismo en el núcleo de una estrella lo que produce la explosión de una supernova y la subsiguiente dispersión de estos átomos imprescindibles a través del cosmos. La fuerza de gravedad los arrastró al centro de la Tierra primitiva, donde participa en la generación del calor que dio inicio en el planeta a las diferenciaciones químicas, la liberación de gases en la primera atmósfera y por último la formación de la hidrosfera. El hierro fundido en el núcleo actúa como una dínamo gigante que genera el campo magnético terrestre. Este crea a su vez los cinturones de radiación de Van Allen que protegen la superficie del globo de la destrucción que causaría la energía cósmica penetrante y elevada y preserva la crucial capa de ozono….
Sin el átomo de hierro no existirían en el cosmos la vida basada en el carbón, las supernovas, la oxidación necesaria para el metabolismo, el campo magnético protector, los cinturones de radiación de Van Allen, la capa de ozono, el metal necesario para la hemoglobina y para moderar la reactividad del oxígeno. La Tierra primitiva no se hubiese calentado, no se hubiese constituido la atmósfera y la hidrosfera.
La intrigante e íntima relación entre la vida y el hierro, entre el color rojo de la sangre y la agonía de una estrella distante, no sólo indica la importancia de los metales en la existencia humana sino para todo tipo de viviente en general.14
Lo dicho nos señala claramente lo relevante del átomo de hierro. Y que en el Corán se llame la atención en particular sobre este metal, enfatiza su importancia. El Libro Sagrado encierra otras verdades respecto a dicho elemento. Por ejemplo, el capítulo "Al Hadid" (El Hierro) en árabe contiene dos códigos matemáticos bastante interesantes.
"Al Hadid" es el capítulo 57 del Corán. Si se suman los valores numéricos de sus letras en árabe, también da 57. (Para este tipo de cálculo, llamado abjad, ver la sección de Cálculos Numéricos en el Corán).
El valor numérico de sólo la palabra "Hadid" es 26, en tanto que el número atómico del hierro es 26.
Por otra parte, en un reciente tratamiento de cáncer fueron usadas partículas de óxido de hierro y se observó un proceso positivo. El equipo conducido por el doctor Andreas Jordán en el conocido hospital "Caridad" de Alemania, logró destruir células cancerosas con esta nueva técnica -fluído magnético hipertérmico, es decir, líquido magnético a temperatura elevada- desarrollada para el tratamiento de dicha enfermedad. En el paciente de 26 años no se observaron células cancerosas en los tres meses siguientes.
Este método se puede resumir en cuatro pasos.
1. Un centímetro cúbico de un líquido que fluye fácilmente por los vasos sanguíneos y que consiste en miles de millones de partículas de óxido de hierro - mil veces más pequeñas que las células sanguíneas- , se inyecta en el tumor por medio de una jeringa especial. Las partículas se diseminan a través de las células tumorales.15
2. El paciente es colocado en un aparato con un potente campo magnético.
3. Dicho campo magnético envuelve al cuerpo y se empieza a enviar partículas de óxido de hierro al tumor, el cual eleva su temperatura hasta 45 °C (113 °F).
4. En unos pocos minutos las células cancerosas, incapaces de protegerse del calor, son debilitadas o destruidas. Después el tumor puede ser completamente erradicado con aplicaciones de quimioterapia. 16
Con este tratamiento el campo magnético influye sólo en las células del tumor con óxido de hierro. La expansión de esta técnica es un gran avance en el manejo y posible cura de una enfermedad potencialmente letal y tan ampliamente extendida. Y que para ello se use el hierro, que como ya hemos indicado, … encierra una gran fuerza y ventaja para los hombres… (Corán, 57:25), es particularmente notable. En realidad, puede ser que en dicho versículo el Corán esté indicando los beneficios del hierro para la salud humana. (Y Dios sabe mejor).
La relatividad del tiempo, un hecho científico enunciado primero teóricamente por el conocido científico Albert Einstein en los primeros años del siglo XX y comprobado después, demostró que el tiempo depende de la masa y de la velocidad de la luz. Hasta ese momento la gente no sabía que el tiempo era un concepto relativo, y que podía cambiar según las condicionantes del caso. ¡Sin embargo, el Corán ya incluye información acerca de la relatividad del tiempo!
… Un día junto a tu Señor vale por mil años de los vuestros. (Corán, 22:47)
El dispone en el cielo todo lo de la tierra. Luego, todo ascenderá a El en un día equivalente en duración a mil años de los vuestros. (Corán, 32:5)
Los ángeles y el Espíritu (es decir, el arcángel Gabriel) ascienden a El en un día que equivale a cincuenta mil años. (Corán, 70:4)
El tiempo es un fenómeno que depende enteramente de quien lo percibe. Mientras un determinado lapso de tiempo parece lar- go para una persona, puede parecer corto para otra. Para conocer lo correcto necesita- mos de instrumentos tales como relojes y calendarios. Es imposible elaborar sin ellos un juicio correcto sobre el paso del tiempo. |
El hecho de que la relatividad del tiempo se mencione tan claramente en el Corán, que comenzó a ser revelado en el 610, es otra evidencia de que éste es un libro santo.
Uno de los datos que suministra el Corán sobre la lluvia consiste en que ella es derramada sobre la tierra en una medida definida. Esto se menciona en la Sura Zujruf (El lujo) en estos términos:
"Es El Quien hace descender agua del cielo en una medida definida, y con ella revivimos una tierra muerta. Del mismo modo se os hará surgir (de la muerte el día de la resurrección)" (Corán 43:11)
Esta medida global de la lluvia también ha sido descubierta por las investigaciones modernas. Se estima que en un segundo se evaporan de la superficie terrestre aproximadamente 16 millones de toneladas de agua. En un año el número asciende a 513 billones de toneladas, y ésta equivale a la cantidad de lluvia que cae sobre la tierra en el mismo período. Esto significa que el agua circula continuamente en un ciclo equilibrado, según una “medida” definida. La vida sobre la tierra depende de este ciclo del agua. Aunque los hombres utilizaran toda la tecnología disponible hoy día en el mundo serían incapaces de reproducir este ciclo artificialmente.
Incluso un pequeño desvío en este equilibrio provocaría rápidamente un grave desajuste ecológico que pondría fin a la vida aquí. No obstante esto nunca ocurre, y la lluvia continúa cayendo cada año exactamente en la misma proporción tal cual fue revelado en el Corán.
La proporción de lluvia no tiene que ver simplemente con la cantidad sino también con la velocidad de caída de sus gotas que, independientemente de sus medidas, no exceden cierto límite.
Cada año la cantidad de agua que se evapora y que cae de vuelta a la tierra en forma de lluvia se mantiene "constante": 513 billones de toneladas. Esta cantidad invariable está declarada en el Corán por la expresión "hace descender agua del cielo en una medida definida". Que esta cantidad se mantenga constante es muy importante para la continuidad del equilibrio ecológico, y por ende para la vida. |
El alemán Philipp Lenard, Premio Nobel de física en 1905, halló que la velocidad de descenso de la gota aumentaba con el mayor diámetro de la misma hasta que llegaba a 4,5 centímetros (0.18 pulgadas). La velocidad de caída no pasaba de los 8 metros/segundo (26 pies/segundo) con gotas de mayor diámetro. Eso lo atribuyó a la modificación de la forma que sufría la gota al aumentar de tamaño debido al flujo de aire. Esa modificación incrementaba la resistencia del aire y la gota disminuía su velocidad.
Como podemos ver, el Corán también atrae nuestra atención sobre la sutil corrección en el valor de caída de la lluvia, lo cual era totalmente desconocido para el ser humano hace 1.400 años.
El proceso de formación de la lluvia fue un gran misterio durante largo tiempo. Sólo después que se inventara el radar meteorológico fue posible descubrir las distintas fases en su generación. Según las investigaciones se produce en tres etapas. En primer lugar la “materia prima” de la lluvia asciende en la atmósfera impulsada por el viento. Luego se forman las nubes, y por último aparecen las gotas de lluvia.
El relato coránico sobre la formación de la lluvia se refiere exactamente a este proceso. En un versículo se lo describe de la siguiente manera:
La ilustración anterior muestra cómo se liberan en el aire gotitas de agua. Este es el primer paso en la formación de la lluvia. Después de ello las gotitas de agua en las nubes recién formadas quedarán suspendidas en el aire y luego se condensarán formando la lluvia. Todas estas etapas están descriptas en el Corán. |
"Dios es Quien envía los vientos que levantan las nubes y El las esparce por el cielo como El quiere. Las fragmenta en racimos oscuros y entonces ves que sale de dentro de ellas la lluvia. Cuando la derrama sobre aquellos que El quiere de Sus siervos, he aquí que éstos se regocijan" (Corán 30:48)
Examinemos ahora más técnicamente las distintas etapas delineadas en el versículo.
Primera etapa: “Dios es Quien envía los vientos...”.
Innumerables burbujas que se forman en los océanos están constantemente estallando y provocando así que minúsculas partículas de agua sean proyectadas hacia la atmósfera. Estas partículas, ricas en sales, son transportadas por los vientos y ascienden en la atmósfera. A dichas partículas se las denomina aerosoles (dispersión coloidal de un sólido o líquido en un gas), y funcionan como trampas de agua que forman nubes de gotas que juntan alrededor de ellas vapor de agua que asciende desde los océanos en forma de diminutas gotitas.
Segunda etapa: “... y El las esparce por el cielo como El quiere. Las fragmenta en racimos oscuros...”.
Las nubes pequeñas (cumulus) son arrastradas y reunidas por el viento, o sea como dice el versículo: “... Dios empuja las nubes y las agrupa...”. |
Las nubes se forman con vapor de agua que se condensa alrededor de los cristales de sal o de partículas de polvo en el aire. Las nubes están suspendidas en el cielo y esparcidas o cubriéndolo porque las gotas de agua en ellas son muy pequeñas con un diámetro entre 0,01 y 0,02 mm. (0,004 y 0,008 pulgadas).
Tercera etapa: “... y entonces ves que sale de dentro de ellas la lluvia...”.
Las minúsculas partículas de agua que rodean a los cristales de sal y a las partículas de polvo se condensan y espesan formando las gotas de lluvia que, al volverse más pesadas que el aire, dejan las nubes y caen al suelo en forma de aguacero.
Como vemos, cada etapa en la formación de la lluvia está descripta claramente en el Corán. Más aún, están explicadas exactamente en su secuencia correcta. Dios expone de la forma más ajustada este fenómeno natural, al igual que muchos otros, y los hace conocer a través del Corán siglos antes de que el ser humano se percate de los mismos.
En otro versículo se da la siguiente información sobre la generación de la lluvia:
¿No ves que Dios empuja las nubes y las agrupa, y, luego, forma pilas (nubarrones), y entonces ves salir la lluvia de ellas? El hace descender del cielo montañas (de nubes) en las cuales hay granizo, azotando con él a quien El quiere, y desviándolo de quien El quiere. El resplandor de su relámpago casi deja sin vista. (Corán 24:43)
Estudiando los tipos de nubes, los científicos se han topado con sorprendentes resultados en lo referente a la formación de las nubes de lluvia. Estas se forman según un sistema y etapas definidas. En la formación de los cumulonimbos (o cumulus nimbus), un tipo de nube de lluvia, se observan las siguientes etapas:
Primera: Desplazamiento: las nubes son transportadas, esto es, empujadas por el viento.
Segunda: Unión: Luego, nubes pequeñas (cumulonimbo) conducidas por el viento se juntan con otras y forman una más grande.17
(A) Pequeñas nubes aisladas (cumulus). |
Tercera: Apilamiento: cuando las nubes pequeñas se unen, las corrientes ascendentes dentro de la nube más grande se incrementan. Las corrientes ascendentes cerca del centro de la nube son más fuertes que las cercanas a los bordes, y esto provoca que el cuerpo de la nube crezca verticalmente, y así se apila hacia arriba. Este crecimiento vertical provoca que el cuerpo de la nube se estire hacia regiones más frías de la atmósfera, donde comienzan a formarse gotas de agua y granizo que crecen más y más. Cuando estas gotas de agua y granizo se vuelven demasiado pesadas para ser sostenidas por las corrientes ascendentes, comienzan a desprenderse de la nube en forma de lluvia, granizo, etc.18
Debemos recordar que los meteorólogos sólo recientemente han descubierto estos detalles sobre la formación de las nubes, su estructura y función, y esto gracias a la utilización de equipos modernos como aviones, satélites, computadoras, etc. Resulta evidente que Dios nos ha dado en esto una información que no podía conocerse 1400 años atrás.
Słowo „zesłanie” może w pierwszej chwili przywodzić na myśl, iż żelazo zostało symbolicznie zesłane, inaczej mówiąc, dane ludziom przez Allaha, jednak przy dokładnym studium wersji oryginalnej Koranu można zauważyć, iż słowo „enzelma” nie posiada takiego symbolicznego znaczenia i jest używane zawsze dla określenia stanu realnego. Arabowie posługują się nim mówiąc o padającym deszczu czy śniegu. W tym właśnie kryje się tajemnica wersetu: dzięki współczesnym odkryciom w dziedzinie astronomii wiadomo, że znajdujące się na Ziemi żelazo pochodzi od gwiazd olbrzymów.24 Zresztą nie tylko żelazo znajdujące się na Ziemi, ale żelazo całego Układu Słonecznego pochodzi z innych systemów, ponieważ wysokość temperatury słońca nie wystarcza aby pierwiastek ten mógł powstać. Żelazo może powstać tylko na gwiazdach olbrzymach, których temperatura dochodzi do kilkuset milionów stopni Celsjusza. Gwiazdy te, nazwane Nowa i Supernowa, rozpadają się, kiedy występująca na nich ilość żelaza przekracza pewien poziom. W wyniku ich rozpadu zawierające żelazo meteory przemieszczają się po wszechświecie.25 W astronomicznych źródłach znajdujemy takie opisy:
„Istnieją także dowody działań starszych gwiazd Supernowa: pojawiające się na dnie oceanu żelazo typu 60 powstało pięć milionów lat temu, po wybuchu Supernowej znajdującej się w odległości dziewięćdziesięciu lat świetlnych od Słońca. Żelazo typu 60 jest radioaktywnym izotopem, który po przejściu nukleosyntezy dostał się do atmosfery a następnie do warstw ziemi.”26
Jak widać żelazo, które powstało na odległych gwiazdach zostało na Ziemię zesłane w postaci meteorów, dokładnie tak, jak to opisuje Koran. Wiadomości te nie mogły być wynikiem obserwacji astronomicznych, bo w VII wieku takowych nie było. Jedynym wytłumaczeniem znalezienia się tej wiadomości w Koranie jest to, iż jest on słowem bożym.
Oprócz tego warto wspomnieć o ciekawej formie matematycznej suey Żelazo: Żelazo jest pięćdziesiątą siódmą surą koraniczną, sura posiada 57 ebdżedów, a słowo „żelazo” pojawia się w nim 26 razy (26 to liczba atomowa żelaza).
Sura Żelazo zawiera bardzo ciekawą formę matematyczną: Żelazo jest pięćdziesiątą siódmą surą koraniczną, sura posiada 57 ebdżedów, a słowo „żelazo” pojawia się w nim 26 razy (26 to liczba atomowa żelaza).
Estas corrientes ascendentes provocan que el cuerpo de la nube crezca verticalmente, apilándose hacia arriba. Este crecimiento vertical hace que el cuerpo de la nube se extienda hacia regiones más frías de la atmósfera, donde se forman gotas de agua y granizo que van creciendo más y más. Cuando estas gotas de agua y granizo se vuelven demasiado pesadas para que las corrientes las sostengan, comienzan a caer de las nubes como lluvia, granizo, etc. Este hecho científico fue anunciado en el versícu- lo 43 de la Sura An-Nur catorce siglos atrás por Dios de esta forma: "... y, luego, forma pilas, y entonces ves salir la lluvia de ella...". |
1. S. Waqar Ahmed Husaini, The Quran for Astronomy and Earth Exploration from Space, Goodword Press, 3. baskı, New Delhi, 1999, ss. 103-108.
2. http://www.time.com/time/time100/scientist/profile/hubble.html
3. http://www.time.com/time100/scientists/profile/hubble.html
4. http://home2.swipnet.se/w-20479/Day/htm
5. Mazhar U.Kazi, 130 evident miracles in the Quran, Crescent Publishing House, NY, USA, 1998, s.52
6. Mazhar U.Kazi, 130 evident miracles in the Quran, Crescent Publishing House, NY, USA, 1998, s.53
7. Bilim ve teknik, lipiec, 1983
8. www.woodrow.org/teachers/esi/1998/p/weather/Corriolis. htm
9. http://royal.okanagan.bc.ca/mpidwirn/atmosphereandclimate/atmslayers.html; Michael Pidwirny, Atmosferic layers, 1996
10. www.tpub.com/weather3/4-27.htm;NumericalPrediction Models used by NWS
11. www.godandscience.org/apologetics/designss.html.
12. www.webhome.idirect.com/alila/writings/Physics.htm. .
13. www.pubs.usgs.gov/publications/text/inside.html
14. www.wamy.co.uk/announcements3.html; prof.Zighloul Raghib El-Naggars speech
15. Carolyn Sheets, Robert Gardner, Samuel F.Howe, General Science, Allyn and Bacon Inc. Newton, Massachusetts, 1985, s.305
16. www.beconvinced.com/science/QURANMOUNTAIN.htm
17. Carolyn Sheets, Robert Gardner, Samuel F.Howe, General Science, Allyn and Bacon Inc. Newton, Massachusetts, 1985, s.305
18. Powers of Nature, National Geografic Society, Washington D.C.1978, ss 12-13
19. http://science.nasa.gov/newhome/headlines/ast08dec_1.htm
20. http://science.nasa.gov/newhome/headlines/ast08dec_1.htm
21. Dr Mazhar U.Kazi, 130 Evident Miracels in the Quran, Crescent Publishing House, New York, USA, 1998, s.115
22. http://www.planetwaves.net/polar-NYT.html;New York Times, August19, 2000
23. http://tea/rice.edu./schauer/6.23.2000; http://eri.u.tokyo.ac.jap/seno/sealevel_abst.html; http://theory.uwinnipeg.ca/mod_tech/node195.html;
24. Dr Mazhar U.Kazi, 130 Evident Miracels in the Quran, Crescent Publishing House, New York, USA, 1998, s.110-111
25. http://www.wamy.co.uk/announcements3.html;
26. http://www.istanbul.edu.tr/fen/astronomy/populer/cevre/cevresi.htm;