¡Niños!
¿Os habéis preguntado alguna vez…?
“¿Cómo se formó el universo?”
“¿Cómo se originaron el sol y la luna?”
“¿Dónde estabais antes de nacer?”
“¿Cómo surgieron los mares, los árboles y los animales?”
“¿Cómo los coloridos y aromáticos frutos que tanto nos gustan, como los plátanos, cerezas, ciruelas y fresas, emergen de la oscura tierra? ¿Quién les proporciona sus colores y fragancias?
“¿Dónde aprende la diminuta abeja a hacer una miel tan sabrosa? ¿Cómo es capaz de hacer un panal de esquinas tan perfectas?
“¿Cómo era el primer ser humano?”
“Tu madre te dio a luz, pero el primer ser humano no pudo haber tenido un padre o una madre; entonces, ¿cómo apareció de repente?
En este libro, hallaréis la respuesta correcta a todas estas preguntas.
¿Sabéis cuál es la respuesta correcta? Todo lo que veis a vuestro alrededor, incluyéndoos a vosotros mismos, a vuestros amigos, a vuestros padres, a la tierra, al sol, a la comida que tanto os gusta(los plátanos, las cerezas, las fresas), a las coloridas rosas y violetas, a las maravillosas fragancias, a los seres humanos, a los gatos, perros, hormigas, abejas, caballos, pájaros y mariposas, en resumen, todo, fue creado por Dios.
Os preguntamos: “¿Habéis pensado alguna vez dónde aprende la diminuta abeja a hacer una miel tan sabrosa?”. Bien, Dios es Quien enseña a la abeja a hacer la miel.
Pero hay gente que inventa cuentos sobre estas cosas. No creen que Dios lo haya creado todo e inventan historias. Esta gente se llama “evolucionistas” y la historia que cuentan se llama “evolución”.
Queremos que aprendáis lo correcto, y por eso hemos empezado diciéndoos la verdad. En la segunda parte del libro, os contaremos cómo aquellos que creen en la evolución engañan a la gente. Si, después de haber leído este libro, alguien se os acerca un día y os pide que creáis en la teoría de la evolución, le podéis decir que esa teoría no es correcta, y que Dios lo ha creado todo.