En el Corán Dios revela la razón por la que concede bendiciones o las retira:
Esto es así porque Dios no modifica la gracia que dispensa a un pueblo mientras éste no cambie lo que en sí tiene. Dios todo lo oye, todo lo sabe. (Corán, 8:53) Tiene (el ser humano), por delante y por detrás, pegados (ángeles) a él, que le custodian por orden de Dios. Dios no cambiará la condición de un pueblo mientras éste no cambie lo que en sí tiene. Pero, si Dios quiere mal a un pueblo, no hay manera de evitarlo: fuera de El no tienen amigo. (Corán, 13:11) | ||
Lo que se relata en estos versículos son claves muy importantes que la gente en general desconoce o desecha. Dios dice que multiplicará las bendiciones de quienes se ocupan de obrar correctamente, en tanto que las restringirá a quienes realicen malas acciones. Dice asimismo que la variación en la cantidad de bendiciones se producirá según las modificaciones en sus comportamientos y según su sinceridad.
Los creyentes que conocen este secreto de Dios, siempre atentos, intentan ver los propósitos ocultos en Su creación en cada situación con la que se cruzan. Nunca se sienten autosuficientes sino que se esfuerzan al máximo por obtener la perfección moral descrita en el Corán y para corregir sus equivocaciones y faltas. Nunca se atreven a dejar de exhibir la perfección moral y el refinamiento en sus conductas.