1. Lo que está en los cielos y en la tierra glorifica a Alá, el Rey, el Santísimo, el Poderoso, el Sabio.
2. Él es quien ha mandado a los gentiles un Enviado salido de ellos, que les recita Sus aleyas, les purifica y les enseña la Escritura y la Sabiduría. Antes estaban, evidentemente, extraviados.
3. Y a otros de ellos, que no se les han incorporado aún. Es el Poderoso, el Sabio.
4. Ése es el favor de Alá, que dispensa a quien Él quiere. Alá es el Dueño del favor inmenso.
5. Aquéllos a quienes se había confiado la Tora pero no la observaron son semejantes a un asno que lleva libros. ¡Qué mal ejemplo da la gente que desmiente los signos de Alá! Alá no dirige al pueblo impío.
6. Di: «¡Judíos! Si pretendéis ser los amigos de Alá, con exclusión de otras gentes, entonces, ¡desead la muerte, si sois consecuentes!»
7. Pero nunca la desean por lo que sus manos han cometido. Alá conoce bien a los impíos.
8. Di: «La muerte, de la que huís, os saldrá al encuentro. Luego, se os devolverá al Conocedor de lo oculto y de lo patente y ya os informará Él de lo que hacíais».
9. ¡Creyentes! Cuando se llame el viernes a la azalá, ¡corred a recordar a Alá y dejad el comercio! Es mejor para vosotros. Si supierais...
10. Terminada la azalá, ¡id a vuestras cosas, buscad el favor de Alá! ¡Recordad mucho a Alá! Quizás, así, prosperéis.
11. Cuando ven un negocio o una distracción, escapan allá y te dejan plantado. Di: «Lo que Alá tiene es mejor que la distracción y el negocio. Alá es el Mejor de los proveedores».